A lo largo de la historia, los diseñadores tanto como los jardineros se han influenciado en sus ideas y trabajos. Desde el siglo XVI esta conexión era evidente, ya que el diseño de los vestidos de la época de la reina Isabel I era inspirado en las flores. Desde un inicio, no era solamente la moda que se influenciaba por la jardinería: ambas se relacionaban al crear nuevos diseños y colores.
En el siglo XVI, se elegían las flores para jardines en función de los colores más deseados en el mundo de la moda. Esta influencia de dos direcciones ha seguido inspirando a diseñadores de moda contemporánea como Christian Dior, Yves Saint Laurent y Valentino. Así pues, esta conexión ha existido por siglos y no es hasta ahora gracias a la escritora británica Nicola Shulman, que puede ser resumida a través de la exposición Fashion and Gardens en el Museo del Jardín de Londres.
Shulman como su comisaria se ha dedicado a crear las ideas, la investigación, los temas y la inspiración para el espectáculo. La exposición muestra «el ciclo estacional» de la moda y la jardinería. Shulman explica que ambas “miran hacia delante, hacia la próxima estación, intentando anticiparse y adaptarse a los cambios de luz, temperatura y estados de ánimo”. Fashion and Gardens está dividido en tres temas: Jardines en la moda, las modas en el jardín y la teoría del color.
La sincronización de este evento le viene “como anillo al dedo” a Shulman, ya que del 14 al 18 de febrero se realizará uno de los eventos más importantes en el mundo de la moda: London Fashion Week 2014. Durante esta semana, en las pasarelas de varios diseñadores se verá la gran influencia expuesta por Shulman. Hoy, Burberry mostrará una nueva colección primavera-verano inspirada en las rosas.
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