Un equipo de investigación israelí elaboró un sistema que envía un mensaje de texto o un mail a los agricultores, cuando los árboles y plantas necesitan hidratarse. Este avance abre un nueva manera de pensar la manera de abordar el riego a gran escala.
El agua es un recurso indispensable para la vida en el planeta. Según las Naciones Unidas de los cuatro mil millones de kilómetros cúbicos de agua en la Tierra, tan solo 200 mil son aptos para consumo.
Estos espacios están en camino a desaparecer debido al cambio climático, que según la NU es responsable del retroceso de los glaciares, y la reducción del caudal de los ríos, lagos y estanques. En ese sentido, el poco acceso al agua acarrea también problemas alimenticios.
«Para evitar una crisis de alimentos, necesitamos invertir para alcanzar nuevas tecnologías que ayuden a desarrollar la agricultura«, dice un informe del departamento de Comida y Agricultura de la NU.
Según el reporte, uno de cada cinco países en desarrollo enfrentarán crisis hídricas para 2030, siendo las regiones de Oriente Próximo, el norte de Africa y algunas zonas de Asia las más afectadas.
Los científicos del Instituto Vulcani de Israel desarrollaron durante los últimos siete años un ingenioso sistema que permite ahorrar hasta un 50 por ciento del agua, al momento de regar. Este nuevo dispositivo accede a la raíz de un árbol y cuando detecta que los niveles de agua son bajos envía un mensaje de texto al teléfono móvil o un correo electrónico al agricultor para avisarle, o simplemente abre el llave de agua para regarse.
Los líderes del proyecto, los científicos Eran Raveh y Arieh Nadler, se mostraron optimistas con respecto a la economización del agua y consideraron que «el hecho de saber cuáles son las plantas que necesitan hidratación les ahorrará a los agricultores hasta un 50% en costes de riego».
«Vivimos en una época donde las necesidades hídricas específicas comienzan a ser una realidad, donde se necesita cuidar los recursos. El dispositivo será extremadamente ventajoso para agricultores de frutas y verduras», explicó Raveh, PhD en agricultura y horticultura.
Kenji Yoshinaga, director de la división de ‘desarrollo de tierra y agua’ de las Naciones Unidas sostuvo «que es importante que el debate internacional entienda que la agricultura utiliza más agua que ninguna otra industria».
Las cifras de la NU son reveladoras en este aspecto: la agricultura utiliza el 70 por ciento del agua consumida en el mundo, mientras que el 20% se lo llevan otras industrias y el 10%, el uso hogareño.
El dispositivo, que tiene forma de martillo, puede implantarse en el árbol o en la raíz de la planta. Este sistema monitoriza las corrientes eléctricas mediante pulsos, y cuando detecta que son más bajas de lo normal, emite una señal de alerta y advierte al responsable.
Nadler, uno de los científicos, aseguró que «el sensor permitirá que el nivel de irrigación, y sobre todo sus plazos, sean controlados por los agricultores».
Sobre el Instituto Vulcani
El Instituto Vulcani es una institución que depende del Ministerio de Agricultura de Israel y se especializa en la investigación agropecuaria. Se ubica unos kilómetros al sur de Tel Aviv, en una zona árida de escasos recursos hídricos, donde cada contribución tecnológica que facilite la gestión de una plantación es capaz de marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso. Los orígenes de la institución se remontan a 1921, cuando los primeros inmigrantes sionistas comenzaron a dedicarse a la agricultura.