Seguramente tendrás algunos amigos que te habrán obsequiado con algún licor exquisitamente dulce que tiene el valor añadido de haber sido realizado con sus propias manos. Las bebidas alcohólicas, que en su elaboración contemplan las flores como ingrediente principal, resultan muy apreciadas y no son más complicadas de obtener que otros licores.
Si te atreves y sigues leyendo, tú también podrás ofrecer un delicioso licor de flores a tus próximos invitados.
Un poco de historia
La producción de licores data desde tiempos antiguos y en algunos escritos se habla de la destilación de hierbas y plantas por sus propiedades curativas o como tonificantes. A través de los siglos fueron también conocidos como elixires, aceites y bálsamos.
Existen distintos tipos de licores; los que se hacen con un solo componente que predominará en su sabor y aroma, y los que se elaboran con la mezcla de éstos.
Para producirlos, se pueden destilar todos los ingredientes al mismo tiempo y endulzar y dar color luego a esta destilación, y también se puede agregar las hierbas o frutas a la destilación base, cosa que conservará el brillo y bouquet de los ingredientes.
Haz de alquimista
Para ser un perfecto alquimista del siglo XXI, necesitarás cuatro componentes básicos: agua, azúcar, alcohol y flores o hierbas.
El agua ha de ser destilada, el azúcar deberá ser blanco si queremos obtener un licor incoloro, y moreno si lo queremos oscuro (aunque ya sabes que, para tu salud, lo mejor es huir de azucares refinados, o sea que si no te importa el color, escoge azúcar moreno). El tipo de alcohol que uses determinará la cantidad de agua que debas mezclar; si usas alcohol de 90 grados, precisarás de partes iguales de agua y alcohol, si usas alcohol de 60, requerirá un cuarto de agua de su volumen total. También hay personas que prefieren usar una base de vodka u orujo como aguardiente substitutivo del alcohol neutro.
Y ahora, a escoger de tus macetas y planteles: albahaca, menta, salvia, romero, laurel, mejorana, saúco… o flores: rosa, acacia, jazmín…
Si prefieres seguir un paso a paso y no hacer experimentos, te hemos preparado una sencilla receta que ¡se te subirá a la cabeza!
Licor de flores
Ingredientes:
100 pétalos de rosas rojas
10 flores de jazmín
10 flores de azahar
Media caña de vainilla
2 clavos de especia
50 gramos de pasas de Corinto
Un litro de aguardiente
1/2 kilo de azúcar
1/2 litro de agua
Preparación:
Coloca los pétalos, flores, clavo, vainilla, pasas y aguardiente en un recipiente y ciérralo herméticamente. Agítalo de vez en cuando. Transcurridos treinta días, prepara un jarabe con azúcar y agua, y mézclalo con la preparación macerada. Vuelve a agitarlo y, finalmente, fíltralo.
Ahora ya puedes compartir tu magia alquimista con quien quieras.