Funcionarios chinos han sido fotografiados mientras teñían de verde el césped de la ciudad de Chengdu.
Muchas ciudades a lo largo y ancho del planeta gastan importantes cantidades de dinero en cuidar sus jardines para que luzcan lo más hermosos que puedan. En la ciudad china de Chengdu han encontrado un método para luchar contra el tono grisáceo de sus calles, provocado por las densas nubes que cubren la ciudad, fruto de la polución.
Unos periodistas fotografiaron a unos trabajadores del servicio municipal de jardineria de la ciudad de Chengdu rociando con un spray verde algunos jardines públicos del municipio.
Según revela el diario británico The Telegraph, un representante de la empresa que suministra el tinte verde ha señalado que «la pintura no es tóxica» y que llevan años suministrando a distintas ciudades del pais y también a campos de Golf.
Desde la empresa se insiste en que el producto «sirve de nutriente al césped» y que dura entre 10 y 14 semanas.
Muchos ciudadanos chinos han experimentado en su calzado este nuevo «truco» del gobierno comunista para lograr una apariencia distinta de la realidad.
Paisajes falsos
Cuentan que cuando el presidente Mao iba de viaje para visitar alguna zona rural, los funcionarios del gobierno se esmeraban en decorar el paisaje para que luciera «como si de una zona próspera se tratara».
Las críticas contra este sistema no se han hecho esperar, aunque la libertad de expresión está limitada en China. Algunos preguntan si no sería mejor «gastarse ese dinero en escuelas», e incluso alguno pregunta con sorna si «pueden teñir el cielo de azul».