Profesionalidad del diseño ligada a la naturaleza
El papel de los profesionales del paisajismo en la sociedad es el de reintegrar al ser humano a la naturaleza, creando espacios de belleza y haciendo que éste tenga una mejor calidad de vida, todo ello, según el papel con el que se define Márcia Souza, la creadora de este jardín en Benfica.
La paisajista siempre quiso trabajar en el mundo del diseño de paisajes; cuando era pequeña su diversión principal era intervenir en el jardín de su madre o ir a casa de sus abuelos para estar entre las plantas. Su unión con la naturaleza siempre fue fuerte y evidente. Márcia define su estilo como el estilo de cada obra o de cada proyecto, en el que estudia su arquitectura y su función, procurando trabajar con harmonía, valorizando cada espacio para hacerlo único, identificable, acogedor, específico…
Un proyecto y dos premisas
El proyecto se localiza a unos cien quilómetros de Belém-Pará, en un conjunto que se encuentra colindante a un río. El área construida es de aproximadamente 1.600 metros cuadrados, y en él también se encuentra una zona cubierta que actúa como área de gimnasia, sauna y piscina.
El proyecto se diseñó y se ejecutó en muy poco tiempo, en total se destinaron cinco semanas a finalizar el nuevo aspecto del ajardinamiento.
Una de las principales necesidades que plantearon los propietarios del jardín a la hora de diseñarlo fue la conveniencia de utilizar especies vegetales de fácil mantenimiento. A ello, la diseñadora paisajista añadió la preocupación por proporcionar practicidad al proyecto para que se sumara a la facilidad de los cuidados que deberían proporcionarle los propietarios.
Tipos de plantación
Las plantaciones escogidas se fijaron según los contrastes de colores y texturas, realizando macizos vegetales y escalonamientos.
Se usó: Liriope muscari, Eugenia sprengellii, Dietes bicolor, Heliconia psittacorum, Lantana camara, Alpinia purpurata…
También se crearon zonas de jardín con grandes flores y espacios con revestimientos de piedra para enmarcarlos.
La iluminación también juega un papel muy importante, y fue pensada para valorizar, de forma puntal, algunas de las plantaciones del jardín, con iluminaciones directas y focalizadas.
Una integración difícil
El mayor desafío de este proyecto fue, para la paisajista, el de integrar la piscina en el jardín, ya que la piscina estaba en un nivel más alto en relación al terreno. Por este motivo se realizó una plantación de flores que parecen elevar el jardín, a la vez que lo integran de forma harmónica, sin competir con otros espacios.
A destacar
El objetivo de este proyecto fue integrar el área de la piscina al jardín, haciendo plataformas de flores, jugando con la piedra… para evitar la sensación de elevación de la piscina respecto del terreno
Las principales exigencias del proyecto fueron su fácil mantenimiento y la integración de las diferentes áreas
Algunos de los elementos como las palmeras Ptychosperma macarthurii fueron aprovechadas de la plantación anterior y reubicadas en la parte central del jardín
El uso de la piedra en forma lineal le da un aspecto moderno al jardín
La iluminación de forma puntual proporciona una valorización de la vegetación focalizando la mirada de la persona que disfruta del jardín en un paseo nocturno
La vegetación fue escogida teniendo en cuenta el clima, la incidencia del viento, la arquitectura y estilo del lugar, el espacio disponible, condicionando la toxicidad o posibilidad de espinas de las plantas por el hecho de ser un espacio que debe ser compartido por niños pequeños
Se estudió la necesidad del cliente verificando a cada paso las funciones de los espacios para ser trabajados de forma diferente
Se potenció la integración del jardín con el paisaje y con la arquitectura de la vivienda
Proyecto: Márcia Souza Lima
Fotos: Octavio Cardoso
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