EL JARDÍN JAPONÉS
El jardín japonés está compuesto por líneas limpias; el diseño es elegante y fundamentalmente discreto. Se caracteriza por su sencillez y naturalidad. Para apreciar un jardín japonés en su totalidad es necesario comprender parte de la filosofía de la que nace, puesto que detrás existe mucho más de lo que se percibe a simple vista. Como cualquier otra disciplina artística, la jardinería está influida por el contexto histórico en el que ha ido evolucionando. La historia, la estructura social y la religión son los factores clave que han dado forma al desarrollo de los jardines japoneses tal y como los conocemos a día de hoy.
En el momento de diseñar un jardín, hay varios estilos que debemos tener en cuenta. Los grandes jardines de paseo, los jardines de los templos zen (también denominados jardines secos), los jardines de la ceremonia del té y los jardines de patio interior.
JARDINES DE PASEO
Se trata de jardines para pasear o lo que habitualmente conocemos como parques públicos, son un legado de la antigua tradición china, que introdujo a través de los jardines imperiales. Son lugares donde los paseantes pueden disfrutar de una relajada caminata sumergidos en un bonito escenario. En ellos confluyen todos los ingredientes propios del jardín japonés: las rocas, las plantas y el agua.
JARDINES SECOS ZEN
No se trata de jardines en el sentido más estricto de la palabra, son obras de arte, un acertijo. Este tipo de jardines no contienes mucho más que unas rocas desnudas en medio de una parcela de arena, pero su poder hechizante es capaz de embelesar al observador durante horas, durante toda una eternidad.
JARDINES DE TÉ
El jardín de té, a primera vista, no parece muy diferente de un jardín sencillo formado por un sendero de piedra, un farol, un cuenco para el agua y un diminuto cobertizo. En realidad están formados por dos jardines, una exterior donde el invitado aguarda a que el anfitrión les indique que pueden pasar al jardín interior, mucho más íntimo y al que se accede a través de un camino empedrado.
JARDINES DE PATIO INTERIOR
En Oriente, China y Japón, todas las dependencias de la casa están orientadas hacia un patio interior. No se trata de espacios muy grandes, al contrario, suelen ser de reducidas dimensiones, muy poco soleados y poco acogedores a primera vista, se trata de pequeñas hermosas creaciones. Lo más importante es crear sensación de amplitud, no sobresaturando el espacio de elementos innecesarios. Con elementos sencillos, como la grava y unas cuantas rocas y acompañado de una plantación minimalista de bambú o juncos.