El prototipo ha sido especialmente desarrollado para su uso privado, así como para un sector hotelero exclusivo.
Una compañía australiana ofrece por 4,7 millones de dólares (3,6 millones de euros) una isla móvil flotante de 1.000 m2 de superficie con espacio para 12 residentes en 6 habitaciones dobles y con una capacidad para 4 personas en tripulación, según el New York Daily News.
Este producto que está siendo construido y manufacturado en Alemania y Hungría, es todavía un prototipo, el modelo definitivo se dará a conocer a finales de 2013.
La isla ha sido especialmente desarrollada para su uso privado, así como para un sector hotelero exclusivo. El lugar soñado, que han llamado Orsos Island, tiene alrededor de 400 m2 en cada planta, más de 20 metros de ancho y 37 metros de longitud y se puede transportar a cualquier lugar que su dueño desee.
La parte más alta de la isla, su terraza, está atravesada por un gran espacio abierto con un techo solar, además de jacuzzi, sillas de playa y un espacio especial para entretenimiento. Además, cuenta con un bar para los residentes, todo customizable.
El nivel más bajo está situado debajo la línea del agua, donde se encuentra un área especial para eventos. La cubierta principal tiene un gran acuario y está equipada con una pequeña cocina, bar y restaurante.
La isla también da la opción establecer un parque residencial mediante la conexión de varias islas a través de un sistema de muelle fijo o variable, que a su vez puede estar conectado con el continente.
«Orsos Islas representa una experiencia de vacaciones fácil, relajada y personal. La concepción de la isla combina un ambiente personal, la experiencia natural y la movilidad de un yate, con la comodidad de un hogar de tierra firme», señala la marca en su página web.
Isla ecológica
Además, el proyecto cuenta con un sistema de alimentación autónoma, el que respeta el medio ambiente basado en la utilización de energía eólica, solar y recuperación de calor del agua de mar como fuente de energía. Este sistema se alimenta, tanto de día como de noche, por un mecanismo de energía eólica silenciosa, así como más de 120 m2 de paneles solares que hacen más uso de la luz del día.
La recuperación de calor del agua de mar es la base para la calefacción y aire acondicionado. Estas propiedades hacen que la isla sea ecológica y sostenible sin dejar un impacto en la naturaleza.